En la última década, según datos del Banco Central, la deuda de los hogares chilenos ha aumentado, esto como una consecuencia de la mayor cobertura y acceso al financiamiento bancario. De esta manera, el desarrollo del mercado del crédito ha convertido al fenómeno de la deuda en un aspecto cotidiano en la vida de los ciudadanos y, por ende, su regulación ha pasado a ser una preocupación legislativa.
En este contexto, a fines del año 2022 un grupo de diputados ingresó un proyecto de ley con el objetivo de consagrar el derecho al olvido financiero que permitiría a los deudores eliminar sus datos personales financieros cuando, cumplida la finalidad de su conservación, no existan razones legítimas que justifiquen su almacenamiento.
La propuesta incluye un deber para las personas, tanto naturales como jurídicas, que mantengan registros históricos de deuda, relativo a eliminar la información transcurridos cinco años o más desde la mora o retardo de la obligación o desde que esta se haya hecho exigible, extendiéndose a las deudas que se hayan hecho inexigibles de manera general. Junto con esto, el proyecto impide a las entidades bancarias utilizar como fundamento el registro histórico de deuda del solicitante para negar un determinado producto o servicio financiero.
Si bien la iniciativa pretende limitar el tiempo en el cual se conserva la información, podría ser perjudicial para el sistema financiero. Lo anterior, porque las personas podrían ser incentivadas a no pagar sus deudas lo que perjudicaría al resto de actores. En este sentido, creemos que es preferible avanzar en el Proyecto de Ley de Datos Personales y el Proyecto de Ley que crea un Registro de Deuda Consolidada. Ambos, podrían ser la solución en estos casos.
Lo cierto es que estas normativas aún se encuentran en etapa de discusión y deberán armonizarse en función de su consecuente aprobación. Si bien la finalidad del derecho al olvido financiero es positiva, no debemos olvidar la importancia de proteger al sistema financiero de aquellos deudores que perduran en el tiempo. En este sentido, la recomendación es mantener la atención en la tramitación de estos proyectos, ya que en cualquier caso impactarán directamente al mercado y sus actores.
Publicación escrita por Constanza Pasarin | Asociada | Grupo az Tech